Este hotel no solo capitaliza el crecimiento del turismo premium en el Caribe, sino que establece un nuevo estándar en lujo responsable, combinando innovación tecnológica, conservación ambiental y rentabilidad. Con una inversión inicial de $129.2M y un plan de mitigación de riesgos robusto, el proyecto se posiciona como una apuesta estratégica para inversionistas que buscan impacto social, ambiental y financiero.